La muchedumbre que iba a la fiesta, oyendo que Jesús se acercaba a Jerusalén, tomaron ramos de palmas, salieron a su encuentro y gritaban:
– Hosana, bendito el que viene en nombre del Señor, el Rey de Israel. (más…)
14, marzo, 2011
– Hosana, bendito el que viene en nombre del Señor, el Rey de Israel. (más…)
14, marzo, 2011
14, marzo, 2011
14, marzo, 2011
14, marzo, 2011
14, marzo, 2011
16, marzo, 2010
16, marzo, 2010
16, marzo, 2010
El buen humor es salud.
¿Estás seguro de pensar lo suficiente
en este aspecto de tu bienestar? (más…)
16, marzo, 2010
Vosotros mismos habéis visto lo que he hecho con los egipcios, de qué manera los he llevado sobre alas de águilas, y tomado para Mí. Pues si oís mi voz y guardáis mi pacto, seréis para mí una porción elegida entre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra, y seréis para Mí un reino sacerdotal y una nación santa. (más…)
16, marzo, 2010
16, marzo, 2010
13, marzo, 2009
13, marzo, 2009
13, marzo, 2009
13, marzo, 2009
13, marzo, 2009
13, marzo, 2009
20, marzo, 2008
Salomón puso al frente de su escolta personal a Jeroboán, un hombre honesto y valiente. Un día le profetizaron que el reino de Salomón se dividiría en dos en castigo de sus idolatrías, y que a él le tocaría reinar sobre diez tribus. Más adelante tuvo que huir a Egipto. (más…)
20, marzo, 2008
Hace años leí el diario de una persona muy joven. Me impresionó su contenido. Hoy deseo copiarte uno de sus párrafos. Creo que te servirá de aliento. Decía así: «Estoy triste; sola; sin Dios en mi alma. Necesito confesarme, pero no me atrevo. Me da vergüenza. Intento luchar, pero no puedo. Siento un peso enorme. Quizás vaya mañana. Sí, de mañana no pasa. Aun así no me quedo tranquila. Sé que debo hacerlo ahora. ¿Seré capaz? ¿Podré vencer? Señor, te necesito; quiero lograrlo pero me cuesta; dame fortaleza. Parece que poco a poco me voy decidiendo. Alguien me anima por dentro: «¡Vence!». «¡Tú puedes!». Voy a dejarlo todo. Iré a confesarme. Son las ocho de la noche. Por fin me he confesado. Tengo una alegría enorme. Pienso que hoy debo aprender una lección importante: jamás caeré en la trampa de mi cobardía o de mi vergüenza. Confesaré semanalmente». (más…)